Si tu niño se levanta con dolor de cabeza, le cuesta mucho despertar, tarda en despejarse, pasa somnoliento durante el día, además está de mal genio y nervioso; es preciso que como padres averigüemos si la calidad y cantidad de sueño es la adecuada, a estos síntomas pueden alertarnos de un posible trastorno de sueño. Según La American Academy of Sleep Medicine, AASM, un niño de entre 3 y 6 años debería dormir entre 10 y 13 horas.
Los seres humanos pasamos una tercera parte de nuestra vida durmiendo, por lo tanto, el sueño es preponderante en nuestra vida, más aún en los niños, pues la falta de sueño no solamente afectará su bienestar sino el de toda la familia, ya que puede convertirse en un verdadero problema la hora de acostarse y las malas noches, puede ser causa de obesidad y de varias enfermedades.
Beneficios del sueño
El sueño tiene una función definitiva tanto a nivel físico como psicológico, es crucial para el desarrollo del cerebro. Los pequeños que duermen las horas necesarias están alertas, suelen tener buena memoria, y lo más importante una buena actitud.
Según estudios se ha demostrado la relación entre el sueño y el crecimiento: la clave está en la hormona llamada somatropina que es la encargada del desarrollo de los tejidos y que se libera especialmente en las horas de descanso.
La mente no se detiene durante el periodo de sueño, continua organizando información, asimilando imágenes, recuerdos y pensamientos en la memoria. Se reorganizan los circuitos cerebrales, lo que es clave para el desarrollo cognitivo del pequeño.
Principales trastornos del sueño infantil:
En las conversaciones entre las mamás surge frecuentemente el tema de la mala noche que les dan sus hijos, y el cansancio que para ellas significa, y no falta quien opine que cómo es posible que un niño que ya tiene más de tres no permita a su familia descansar. Lo que probablemente no se sepa es si el peque tiene algún trastorno de sueño, así que estos indicadores pueden ayudarte:
Sueño Inquieto
En la cama no para de moverse, da vueltas, salta, grita, rechina los dientes, habla dormido. Se despierta fácilmente, pero se le hace difícil volver a dormirse.
En niños entre 3 y 6 años el sueño intranquilo podría ser producido por demasiada exigencia en su conducta, cambios de casa y escuela, problemas familiares, miedos, pérdidas como el fallecimiento de algún familiar, de un amigo, de una mascota.
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Insomnio
Cuando las horas de sueño son frecuentemente menores a las consideradas normales para su edad, podríamos estar hablando de que el niño tiene insomnio, con las subsecuentes conductas como inquietud, irritabilidad y malestar.
La causa más frecuente podría ser la falta de una rutina de sueño, no debemos dar al niño ni somníferos ni tranquilizantes.
Terror Nocturno
A diferencia de las pesadillas aparecen en las primeras horas de la noche. Aunque el niño parezca estar despierto, y grite sin control, estará perturbado y no podrá explicar qué le sucede. Intentar despertarle no funciona. Los latidos de su corazón pueden ser fuertes al igual que su respiración entrecortada. A la mañana siguiente no recordará lo sucedido.
Pesadillas
En el último tercio de la noche suelen darse las pesadillas, que son comunes en la infancia. Las niñas las tienen con mayor frecuencia que a los niños, y las recuerdan al día siguiente para contarlas. Muchas veces se dan por películas que han visto, por cuentos que han escuchado, o por alguna causa de ansiedad que no necesariamente es real. Se despertará llorando y con mucha confusión, pero con un abrazo de papá o mamá se calmará.
Bruxismo
Se conoce con este nombre el rechinar o apretar los dientes durante el sueño. Es producido por niveles de estrés o ansiedad en el niño. Es conveniente conversar con el Odontopediatra sobre el tema de desgaste de las piezas bucales.
Síndrome de apnea obstructiva del sueño
Las pausas en su respiración, los ronquidos fuertes, la respiración con la boca abierta, el pecho se hunde. Las amígdalas y adenoides pueden estar muy crecidas. Se debe consultar con el pediatra.
Los masajes infantiles como estimuladores del sueño
La mayoría de los trastornos de sueño se deben a situaciones de estrés. Los niños necesitan superar esos escollos de la infancia, como el miedo e ansiedad, de la mano cariñosa de sus padres, quienes con paciencia, cariño y comprensión podrán ayudarle, al mismo tiempo que le brindan un ambiente de tranquilidad y seguridad en su hogar.
Los vínculos afectivos se establecen desde la primera infancia, y una de las maneras de hacerlo es a través de ese lenguaje de caricias, no verbal, de cercanía y aceptación que constituye el masaje para los niños.
El masaje provoca un descenso de los niveles de estrés, propiciando una respuesta fisiológica natural para iniciar el proceso de un sueño tranquilo y reparador.
Mas de cincuenta tipos de masajes y técnicas de respiración y relajación, acompañados de música y cuentos divertidos, son los que podrás encontrar en la App de Storybook, que te servirán de una gran ayuda para superar esos trastornos de sueños de tu pequeño tesoro.
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